jueves, 27 de mayo de 2010

Living in 2.0


Quien iba a pensar hace unos años que la vida profesional y personal iba a pasar a través de grupo y redes sociales intangibles. Ése, es tema pasado del post anterior. Habiendo contado mi experiencia a través de Facebook y las Net Works, hoy me encuentro escribiendo aquí.
Hace días pienso en cómo expresar la experiencia de hacer marketing 2.0. Concepto que hoy en Argentina estamos aprendiendo y que varía día a día. Updates e innovaciones se dan todos los días, todas las semanas y hace que sea difícil la actualización permanente. Hace falta tiempo, dedicación y research para darse que es un mundo más desarrollado de lo que uno puede imaginar. Hace falta leer artículos, posts en otros blogs, notas periodísticas en medios digitales y mucho mucha experiencia y vivencia en Facebook y compañía.
Hace un tiempo comencé a pensar, sin conocer todos estos conceptos, que sería interesante seguir algunas reglas de libros que leí en la universidad como “acercarse al consumidor”. Una regla conocida y hasta el día de hoy poco utilizada. Con el advenimiento del web 2.0 esto comenzó a cambiar. Aquellas marcas que durante años intentaron crear un universo alrededor de los productos a tal punto de generar opiniones masivas, algunas positivas y otras negativas, hoy se ven desmitificadas e intentan romper algunas barreras del marketing tradicional. Teniendo como idealizada el nombre de la marca. Un intangible en su nombre pero tangible a través de los productos y que se fidelizaba a través de la publicidad tradicional leanse marcas como Nike, Adidas, Mac, Unilever entre otras, hoy caminan rutas y puentes que quiebran esa diferencia y distancia entre la marca y el consumidor. Ya no basta con el marketing de experiencia para vivir y enamorarse de la marca. Enamorarse y pertenecer a la marca requiere de un esfuerzo de toda la compañía por humanizarse.
Este concepto que es muy interesante ya que autores como Kevin Roberts, de quien publiqué una nota en el día de ayer, presidente mundial de la red Saatchi & Saatchi en su libro “Love marks” dice: “la gente está cansada de que todo sea uniforme o parecido. A los consumidores ya no les llegan frases como "más barato", "más blanco", "más fuerte" o "más grande", señala; necesita conectarse con las emociones. El mundo se percibe a través de los sentidos, proclama. Frente a este punto surgen en mi cabeza algunos adjetivos como humanización, emoción, sensación, fortaleza, decisión y….. me quedo con humanización.
Sé que no es fácil, nadie dijo que lo era!. Haciendo hincapie sobre este punto extiendo este post para decir que es bueno mostrarle al consumidor que los clientes internos o empleados mismos de la compañía deberían ser los primeros enamorados y tramisores de emociones. A traves de blogs, facebook,, Twister, youtube mostrando videos de la vida dentro de la empresa somos capaces de romper la barrera y cruzar el límite para decir “esta empresa está conformada por gente, Acá estamos”, empleados que llevan hasta las medias con el nombre de la empresa y orgullosos publican sus vidas y comentan al resto del mundo diciendo que consumen los productos de la empresa.
Hace un año escuché en una conferencia a uno de los capos de Stapless y él demostró el caso de la compañía. Orgulloso habló durante unos largos pero intensos 40 min. acerca de su trabajo en Stapless, una compañía joven, pequeña pero con muchas ganas de crecer y una importante envergadura montada. Años atrás decidieron retratar el mundo interior y cómo se vive dentro. Armaron un blog, facebook, youtube y la empresa entera se comprometió a formar parte de ella. Postear noticias, videos, fotos e hicieron participes a los consumidores. Hablarles a ellos y mostrar emociones, sensaciones. Se han grabado videos determinando a qué hora y cómo Salen los camiones de logística y distribución.
Ojo! Que esto requiere mayor atención y un grado de comunicación interna alta para que semejantes niveles de exposición no sean negativos. Cuidar el nombre y la marca es mejorar el sistema de comunicación. Fue esclarecedor para mi conocer este caso y decir hacía dónde debemos ir nosotros.
Juan Carlos Signes en su blog escribió algo que me interesó comentar antes de cerrar: “Es una cuestión de humanizar una marca, dotarla de personalidad, de sentimientos.
Las marcas han de transmitir emociones, sensaciones, vivencias, ya no vale vender con características técnicas, hemos de tocar la fibra sensible del consumidor asemejando nuestra marca a un elemento clave de su personalidad.
Aprender constantemente, estar al día en las nuevas tecnologías y tener experiencias diferentes al resto de las personas. Es la clave para empezar el proceso de integración al mundo Web 2.0. Entonces… vamos para adelante. A volver a leer, informarse, conocer y sobre todo… emocionarse y enamorarse de las marcas. Eso es lo que nosotros, comunicadores, podemos transmitir, emoción y sentimiento por algo.

BIENVENIDOS AL MUNDO 2.0


Victoria Helman

martes, 18 de mayo de 2010

Los primeros encuentros...


Todavía busco una manera de empezar a escribir el siguiente post. El número 2 de este nuevo espacio. Entonces ahora me decido a escribir acerca de mi historia con las redes sociales. Mi camino junto a estos maravillosos sitios de intercomunicación y omnipresencia, comenzó hace unos 5 – 6 años cuando al emprender mi regreso de un viaje de 3 meses en Puerto Rico comencé a subir mis fotos a un Server online para mantener el contacto con mis nuevo amigos boricuas. Tiempo después, ya de vuelta en Argentina, no había demasiados conocimientos sobre estos sitios y por falta de actualización dejé de utilizarlos. No subí más fotos y perdí un poco del contacto instantáneo e inmediato con mis amigos, que por suerte continuó vía telefónica, mail o msn.

Un día chateando (concepto un poco antiguo o pasado de moda) con uno de ellos, le digo ¡que lindo sería volver a ver una foto de ustedes! Su contestación fue: Entra en Facebook.com y únete a la red. Ahí vas a poder ver mi vida entera. Sin ir muy lejos y sin pensar en lo que encontraría, me uní a ella. Pude observar lo lindos, grandes y exitosos que eran mis amigos. También me di cuenta que extrañaba mi liberal vida boricua. Pero eso lo dejo para otro capítulo con un café de por medio.

Pasaron los años, estudié mi carrera entera, me recibí, comencé mi carrera como profesional en el mundo de las comunicaciones y hasta entré a trabajar en un medio de comunicación. Cuando de pronto, PLOOP! Para mi sorpresa, y luego de un tiempo largo de no “iniciar sesión” en FB, me encontré con lo que hoy es conocido como el boom de las redes sociales. TODO y TODOS estaban en facebook. WOW!. Esa aplicación en Internet a la que alguna vez me había unido, hoy es la vida misma. LA VIDA PASA POR FACEBOOK! Y entramos en el mundo de los emoticones, del iphone, ipad, hello kitty que envía abrazos y genios que te adivinan la suerte desde Facebook.

De esto pasaron 2 años. Aún en ese entonces la mayoría de las personas que lo utilizaban era gente joven, amigos de amigos, algunas personas se mostraban de manera humana y sincera en el famoso y reconocido MURO. Así fue como me encontré con amigos, me reencontré con viejos amigos, armamos grupos como por ejemplo “10º aniversario de egresados, por el reencuentro” que derivó en una reunión que por cierto fue pautada y retratada en el muro de todos nosotros.

Poco a poco fueron apareciendo tímidamente los primeros grupos de microemprendedores que buscaban asomar sus productos tímidamente en el mundo de las redes. Las grandes empresas prohibían y bloqueaban la utilización de FB en las computadoras de sus empleados por desconfianza y miedo. Puntos que desarrollaré en próximos posts. Entre los artículos e informes que leía por la Web empezaron a aparecer con mucha asiduidad las enseñanzas de WIKIPEDIA. Palabras mayores y mis mayores respetos para aquellas personas que comenzaron probablemente lo que hoy es una de las redes de información académica más grandes del mundo.

Hasta que un día aparecieron en los grupos, en debates, foros, fotos variadas, e-commerce o tiendas online todas las grandes compañías. Éstas perdieron el miedo a la exposición.. Eliminaron algunas de las barreras que durante años intentaron construir. La imagen de marca como ideal, como utopía, para ahora volverse más humanos. La misma marca comienza un nuevo proceso de identificación y humanización dónde el staff de las compañías empieza a mostrarse por dentro.

Hoy hasta nuestros padres, tíos, médicos y profesores de la universidad tienen e interactúan con Facebook.

Y así fue como me encontré haciendo researches y buscando la manera de difundir los productos de la compañía para la que trabajo vía Facebook. Si tan sólo me hubieran dicho hace 6 años que esto iba a suceder, probablemente no lo hubiera creído y no sólo eso, sino que además hubiera aprovechado mejor el tiempo. 

El mundo de las redes sociales, social media o social Networks ha revolucionado las comunicaciones. Generan interactividad, humanismo y espontaneidad en las grandes compañías. Conceptos que hace 10 años eran impensados por parte en las grandes multinacionales.

En los próximos posts empezaré a ahondar sobre algunos puntos específicos e introductorios de las web sociales o el mundo de las web 2.0

sábado, 15 de mayo de 2010

Cerrando una etapa.

Alguna vez me hicieron una pregunta. Y vos qué vas a estudiar? Sin duda alguna contesté, voy a ser licenciada en publicidad. Así fue como hace algunos años decidí comenzar mi camino en la universidad. En ese entonces poco conocía de lo que era ser “publicista”.

Haciendo un recuento y recorrido por todas las materias cursadas pude re-descubrir la amplitud y extensión que tiene la profesión. Es interesante ver cómo como estudiantes cuatrimestre tras cuatrimestre descubrimos nuevas orientaciones, nuevas especialidades y poco a poco nos vamos definiendo hacia “lo que me gusta”. Luego, los recorridos por los empleos y las oportunidades laborales nos hacen cambiar de parecer y nos enfocamos en crear nuestra propia historia y lugar en el mercado laboral.

Nuestra profesión nos exige integridad. Se trata de una constante demanda de diversidad, diferenciación e integración de todos los conocimientos. Ya no bastan las campañas exclusivamente diseñadas para TV o para Radio. Vivimos en el 2000, son épocas de muchos cambios, de muchos nacimientos, desarrollos y oportunidades creativas. Nos encontramos en la era tecnológica y para ello es necesario hacer uso pero no abuso del mismo. La tecnología nos abrió, tiempo atrás, inmensas oportunidades creativas e ingeniosas para comunicar aquello que desea comunicar el cliente. De eso se trata la publicidad. Comunicar y llegar de manera efectiva y de diferentes maneras a aquello que las empresas tienen como retos. Pero ¿qué son los retos?

Hoy por hoy, al vivir en un mundo híper estimulado como en el que vivimos, los retos forman parte del día a día. A diario, como profesionales, desafiamos a nuestras capacidades para poder identificar nuevas estrategias, nuevos caminos, nuevos objetivos y por sobre todas las cosas a diferenciarnos de nuestros competidores y no caer en la ya tan conocida monotonía comunicacional. Entonces, los retos son nuestro mejor aliado. Debemos hacerle frente a cada uno de ellos y salir en busca de lo mejor. De lo novedoso, de lo distinto, de la innovación. En definitiva, hacer eco del don que nos fue transferido. El arte del comunicar.

Somos la generación del i-phone, las redes sociales, los emoticones y la diversidad. Debemos trabajar en equipo: enseñamos lo que sabemos y aprendemos de los que saben más que nosotros. Es por eso que debemos instruirnos constantemente. Queda en nosotros aprender a ser mejores profesionales. Porque los consumidores ya tienen marcas favoritas con las cuales sentirse identificados. Viven las marcas como parte de su experiencia personal. Éstas les permiten diferenciarse del resto y sentirse únicos. De esta manera, debemos involucrarnos en el proceso de manera profesional para poder entender cómo llegar a este nuevo consumidor.

“Consumir para ser ahora se vende como primero soy y por eso consumo determinado producto. La marca pone como protagonista las emociones positivas que experimentan sus audiencias por sobre los beneficios del producto. Nada ha cambiado desde la intensión pero si desde la proposición: la audiencia es de determinada manera y por eso el producto es para esa audiencia, y no al revés”[1]

El producto no se pierde, se pierde la arrogancia del producto, su narcisismo. La marca gana protagonismo y fuerza porque tiene una personalidad más creíble que su competidora.

Las personas desearán las emociones positivas anheladas que luego, asociarán al producto. Emociones positivas que se traducen en sentimientos y actitud: sensatez, autenticidad, convicción, coherencia…

“La pérdida de ingenuidad en el consumo, especialmente en las audiencias más jóvenes, ya no compra la utopía de la felicidad”[2]. Ahora no sólo desean recibir mensajes sino que participar, crean activamente nuevos mensajes que los hagan sentirse que “son parte”. Mostrar un mensaje real, tangible, humano y más cerca de las personas hace que ellos se sientan más próximos de esa promesa que la marca les da.

Ya no se trata de comprar una leche o el pan lactal, compramos lo que queremos sentir, lo que queremos experimentar, cómo queremos lucir. La ecuación parece ser: a consumidores menos ingenuos, estrategias más sensatas.

Así es, estamos plagados de marcas que no dicen nada, que no marcan nada, que no nos dan razones para recordarlas. Queda en nosotros, nuevos Publicistas, forjar el cambio.



[1] Borrachia, Carolina. Revista INFOBRAND “Revista de Marketing, Branding y Comunicación”. Sección “Opinión”. Nº 90. Buenos Aires, Lunes 5 de Septiembre 2005.

[2] Borrachia, Carolina. Revista INFOBRAND “Revista de Marketing, Branding y Comunicación”. Sección “Opinión”. Nº 87. Buenos Aires, Lunes 5 de Septiembre 2005.